¿ A DÓNDE NOS LLEVA EL SISTEMA CAPITALISTA ? (ll)

Después de mi anterior artículo sobre su demoledora política, local y global, de este sistema, seguiré considerando reflexivamente sobre la infinidad de asuntos presentados políticamente como superguais. Sin embargo, por sus efectos socialmente contaminantes, deberán ser críticamente cuestionados, principalmente los concernientes a materias transcendentales. ¿Cómo seguir permitiendo que las instituciones y sus asesorías oculten tramas corruptas? Mencionaré algunas archy conocidas: las de Puyol en Cataluña. Del PP en el País Valenciá, por el ex presidente Francisco Camps Y, por el ex presidente de la diputación de Castellón Carlos Fabra con sus reiteradas tropelías, condenado a varios años de carcel. Las estatales de Bàrcenas, Gurtel... y de Rajoy “donde dije digo...” más el engaño con la recuperación económica, en contra de los sectores populares más castigados. Y ¿qué decir de las acumuladas por la Casa Real, hasta el caso más escandaloso de Urdangarín?

El PSOE, experto políticamente en maniobras -anti-sociales, intenta recuperare para seguir engañando y volver al gobierno central. Desde él, mientras no tenga una oposición de izquierda fuerte y consecuente no, “seudo”, en el parlamento y fuera de él,   repetirá parecidos fraudes a la sociedad con sus anacrónicas siglas, como de los que está acusado en Andalucía. Y ¿qué decir del inicio de los recortes de derechos básicos y del mangoneo de la constitución por Zapatero, de la mano de Rajoy a favor de la banca “mafiosa”, para que mutuamente ambos partidos nos hayan sumido en esta trágica situación? Quienes  dedicando largo tiempo a gobernar fingen conductas irreprochables -aún sabiendo que son serviles monigotes del sistema- con el fin de que la población ingenua y un poco ignorante, les rinda pleitesía electoral en atención a su hipocresía (...) utilizan el márketin para perpetuar la corr     upción. Pero ¡atención!! a algunos partidos pro capitalistas emergentes, que aprovechan “pescando en riu regueltu” para aumentar la confusión “porque al no ser oro todo lo que dicen relucir” apoyarán a los grandes partidos por unas migajas del poder y satisfaciendo su ego, colaborarán con sobornos al gran  latrocinio. Con el tiempo, testigo insobornable, se descubren las farsas como la de Puyol con su gran fraude fiscal y, el cultivo del espacio propicio para la corrupción controlada -según amplia información mediática- bien aprovechada por su hijo primogénito especulando gravemente con subvenciones públicas y comprando con dinero opaco 1.000 sucursales principalmente al banco Santander. Publicar ahora lo relacionad con Puyol ¿Será casualidad, o burda patraña del cerril españolismo neofascista? Si no fuera por la amenaza soberanista ¿cuándo se hubiera conocido, si el fiscal anticorrupción ordenaba a la judicatura “ no meneallo”? (...) Entre corrupt@s anda el mafioso juego ¿Cómo esperarle limpio de los  partidos interclasista ni, de estas instituciones antidemocráticas respecto a la autodeterminación? No es saludable engañarse socialmente; porque todo planteamiento soberanista promovido por dichos partidos y/o por colectivos afines ideológicamente, no rebasarán la acumulación de poder político y económico capitalista Por ello, la soberanía de los pueblos en todos sus ámbitos, principalmente en el económico,  alimentario y educativo/cultural, no puede venir de quienes defienden sus privilegios con la “corruptocracia” representativa sin escrúpulos. Ni de quienes propugnan el neocolonialismo expoliador, de las transnacionales. La plena soberanía podrá llegar con proyectos  democrático-participativos,   por iniciativas territoriales en cooperación internacional. Porque la responsabilidad de un desarrollo sostenible, parte de políticas de auto mantenimiento, consumiendo preferentemente los propios productos, para evitar la carestía de vida y la contaminación atmosférica. ¿Para qué “pasear” de un Estado y continente a otros –salvo excepciones- sino para aumentar la plusvalía y el PIB?        

     Para comprender entre otros, el genocidio e infanticidio palestinos, habrá que recordar la política criminal de Kissinger, señalada en mi anterior escrito y comprobada salvajemente, entre otros muchos sitios en Palestina. En el próximo, haré un comentario sobre la epidemia ébola.

 
                    Paco Torre Soberón